Su obra ha traspasado todas las fronteras

Lienzo donde quedó plasmado el enfoque de dos culturas y la combinación entre lo submarino y lo celestial, trabajo artístico que rompió los limites de la creatividad y la imaginación que debe ser captado a través de la visión que se encuentra en el cerebro y no por la mirada.

Una obra plástica del maestro Wladimir Zabaleta, ilustre hijo de la ciudad de Valencia, traspasó el plano bidimensional para convertirse en una composición musical interpretada por una de las más importantes orquestas de Estados Unidos, acontecimiento que rompió los esquemas tradicionales en la apreciación de las artes plásticas, al realizar una simbiosis entre dos lenguajes: el pictórico y el musical.

En el año 2005, la Fundación Orquesta Sinfónica de Long Beach convocó a un concurso para que 20 parejas de compositores seleccionaran una obra de la colección del Museo Latinoamericano de Arte de Long Beach (MoLAA) y compusieran una pieza musical a partir de la misma.

Los compositores Ana Lara, de México, y Roberto Maggio, de Estados Unidos, escogieron la obra Dos Visiones de Zabaleta que finalmente resultó ganadora entre las 20 concursantes.

Nos cuenta Wladimir que con esta obra quiso plasmar "la visión latinoamericana-caribeña y la visión europea integradas en un solo plano”. De allí el título, y por eso aparecen personajes que son característicos de las obras de Velázquez y Goya, sin embargo, el entorno general en el que se encuentran es tropical, lleno de nubes, estrellas fugaces, peces, que no se sabe si están paseándose en el espació o están sumergidos en la profundidad del mar.

También están presentes los tres elementos étnicos, indios, negros y españoles; hay una combinación entre lo submarino y lo celestial, lo continuo está representado por la parte figurativa y el claroscuro; y lo disperso está personificado en los elementos dispuestos en el espacio por figuras geométricas, peces, astros que mantienen su interrelación a través de la tensión creada por su analogía, como la forma, color, dimensión e intensidad, lo cual relaciona dos estructuras de pensamientos superpuesta, imposibles de separar, las que crean una tercera escena que no es sino una paráfrasis producto de esa relación.

La idea del maestro Zabaleta, autor de esta extraordinaria obra, es que la misma tiene que ser captada a través de la visión que se encuentra en el cerebro y no por la mirada, lo que ha traspasado las fronteras de la creatividad y la imaginación.